El sistema automatizado de recaudación de impuestos danés tuvo una pérdida de miles de millones de coronas danesas

El gobierno danés implementó algoritmos para su sistema centralizado de recaudación de impuestos EFI (abreviatura de Et Fælles Inddrivelsessystem, que significa “un sistema de recaudación compartida”) (Algorithm Watch, 2019). El sistema se inició en 2005 para construir un sistema digital de recaudación de impuestos a nivel local y nacional. Sin embargo, debido a fallas estructurales y tecnológicas críticas, el sistema perdió miles de millones de coronas danesas del erario público en forma de reclamaciones vencidas o no cobradas (ibíd.). La jurista Hanne Marie Motzfeldt atribuye el fracaso a errores en los “datos, diseño, programación e integración en los órganos administrativos que condujeron a una administración en conflicto con la ley” (ibíd.). Además, sostiene que “el conocimiento preciso del funcionamiento de los datos y los procesos comerciales que se volcaron en los sistemas de tecnología de la información se depositaron en gran medida en el proveedor de la tecnología de la información” (ibíd.).

El EFI demuestra la naturaleza problemática y complicada de la excesiva dependencia de la administración pública en las empresas privadas para desarrollar software de inteligencia artificial que pueda garantizar los estándares de transparencia y el respeto de los derechos fundamentales como la privacidad y la protección de datos.